29/4/12

Lírica tradicional. Anónimo.

Vuestros son mis ojos,
Isabel,
vuestros son mis ojos
y mi corazón también.

Madre mía, aquel pajarillo
que canta en el ramo verde,
rogadle vos que no cante, 
pues mi niña ya no me quiere.

Pasas por mi calle,
no me quiere ver: 
corazón de azero
debes de tener.

Diga quien dijere,
quien dijere diga, 
que el amor primero
por jamás se olvida.