29/4/12

El topo y otros animales. Tomás de Iriarte.


Ciertos animalitos,
todos de cuatro pies,
a la gallina ciega
jugaban una vez.

Un perrillo, una zorra
y un ratón, que son tres;
una ardilla, una liebre
y un mono, que son seis.

Este a todos vendaba
los ojos, como es
el que mejor se sabe
de las manos valer.

Oyó un topo la bulla
y dijo: "Pues, pardiez,
que voy allí, y en rueda
me he de meter también".

Pidió que le admitiesen;
y el mono, muy cortés,
se lo otorgó (sin duda,
para hacer burla de él).

El topo a cada paso
daba veinte traspiés,
porque tiene los ojos
cubiertos de una piel.

Y a la primera vuelta,
como era de creer,
facilísimamente
pillan a su merced.

De ser gallina ciega
le tocaba la vez;
y ¿quién mejor podía
hacer ese papel?

Pero él, con disimulo
por el bien parecer,
dijo al mono: "¿Qué hacemos?
Vaya, ¿me venda usted?"

Si el que es ciego y lo sabe,
aparenta que ve,
quien sabe que es idiota,
¿confesará que lo es?